10 millones de árboles han sido talados para dar paso al Tren Maya
Los terribles daños al gran acuífero debido a la construcción del Tren Maya ha generado una oleada de comentarios y profunda indignación. Sin embargo, estas afectaciones no son las únicas que ha provocado este megaproyecto.
Desde el Aeropuerto Internacional de Cancún, se llevó a cabo un sobrevuelo para observar el tramo del Tren Maya y sus consecuencias en cavernas y cenotes.
Pepe Urbina, activista de “Selvame del Tren”, destacó que el ancho del tramo es mucho mayor de lo inicialmente indicado, entre 60 y 90 metros, y señaló la extensa degradación ambiental que ha traído consigo la construcción.
Los impactos se extienden más allá de las áreas directamente afectadas por el tren. La selva se encuentra fragmentada, mutilada, no solo por la infraestructura del Tren Maya, sino también por la apertura de caminos para llegar a la selva y la posterior tala para abrir minas, fragmentando aún más el hábitat natural.
Según especialistas, se estima que más de 10 millones de árboles han sido talados para dar paso al proyecto, sin que hasta el momento se haya dado una respuesta adecuada por parte del gobierno. La ausencia de acciones concretas para mitigar estos daños ha levantado críticas tanto a nivel nacional como internacional.
La construcción del Tren Maya ha provocado la afectación de más de 120 cavernas en el tramo de Tulum a Playa del Carmen, poniendo en riesgo la estabilidad estructural y la vida humana.
Además, la contaminación del Acuífero Maya es evidente, con miles de pilotes destruyendo este valioso recurso hídrico.
A pesar de la orden judicial de suspensión del tramo cinco debido a la falta de estudios ambientales serios, la construcción continúa, violando la legislación ambiental vigente.
El proyecto del Tren Maya no solo representa un atentado contra el medio ambiente y la biodiversidad, sino también una violación flagrante de las leyes nacionales e internacionales en materia ambiental. Es urgente que se tomen medidas concretas para detener estos daños irreparables antes de que sea demasiado tarde.
