¿Por qué el pan de muerto tiene huesitos?
Encima del “montículo” del pan de muerto sobresale un “cráneo”, símbolo de la vida y la muerte entrelazadas.
A sus lados, destacan los huesos de los brazos y las piernas, llamados canillas. Juntas, dan forma a una calavera: un recordatorio dulce de nuestra conexión con quienes ya no están.
Algunos han dicho que estos cuatro huesos representan los rumbos del universo mesoamericano, o los puntos dedicados a los grandes dioses: Quetzalcóatl, Xipetotec, Tláloc y Tezcatlipoca.
Aunque esta interpretación es más un mito que una verdad histórica, nos recuerda cómo la tradición mexicana mezcla lo espiritual y lo simbólico.