En Estados Unidos, un joven decidió jugarle una divertida broma a su mamá. Le dijo que su hermana la llamaba por un AirPod, y ella, confiada, se colocó el supuesto auricular en el oído. Emocionada, comenzó a saludar: “¡Hola, hola, hermana! ¿Hermana?”, pero al no escuchar respuesta, su cara pasó de la sorpresa a la confusión.

Al tocarse el oído, descubrió que no era un AirPod… ¡sino una nuez de la India! Entre risas y un toque de enojo, exclamó: “¿Qué es lo que pasa contigo?”, mientras su hijo no podía parar de reír.

Una muestra de cómo las pequeñas bromas llenas de cariño fortalecen los lazos familiares y dejan recuerdos para toda la vida.