Astronomía: ¿Qué planetas sobrevivirán a la muerte del Sol?

Siempre se ha dicho mucho respecto al universo y todos sus misterios, y en una gran cantidad de ocasiones se ha hablado sobre el fin del mundo, sin embargo, ahora surge una preocupación que si es real y nos afecta a todos: la muerte del Sol. Sigue leyendo para qué conozcas qué es lo que sucederá con el astro rey y todo lo que implica.

La muerte del Sol es un tema que está intrigando a toda la comunidad científica, pues desde que tenemos uso de razón se nos ha enseñado que nuestro Sistema Solar, se llama de esa manera por que los planetas, incluida la Tierra, giran alrededor de esta gran estrella, pero entonces ¿qué pasaría si el Sol muere?

Aunque esto suene muy fatalista, es una realidad que en algún momento esta estrella dejará de emitir su potente luz afectando a los que se encuentran más cercanos a ella.

Y aunque no se tiene una certeza sobre cuándo o cómo será el fin del Sistema Solar es algo que indudablemente pasará. Sin embargo, las investigaciones estiman que la muerte del Sol ocurrirá dentro de mucho tiempo, para ser exactos en casi 5 mil millones de años.

Actualmente esta es una estrella enana amarilla que se conserva como una bola gigantesca de hidrógeno y helio, que según los expertos está a mitad de su vida; y conforme pase el tiempo, la Tierra y los demás planetas se verán afectados por los cambios que esta estrella pueda tener.

Al parecer, las estimaciones prevén que de manera preliminar la Tierra será desprovista de las plantas, muchas de ellas se afectarán y luego la cadena alimenticia colapsará.

“GJ 367b es el planeta más pequeño más allá del Sistema Solar, pero el más pesado, está compuesto casi por completo de hierro”

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En caso de que el sol se extinga debes de saber que la Tierra no sobrevivirá, ya que es el tercer planeta más próximo a esta gran estrella; de tal forma que Mercurio y Venus serán los primeros en ser consumidos y el resto podrían ser empujados hacia afuera.

De acuerdo a un estudio publicado en Nature, solo Júpiter y Saturno podrían sobrevivir a la muerte del Sol gracias a su distancia.

Esto es algo que ya se ha dicho con anterioridad y al saber que esta estrella se encuentra a la mitad de su vida, se puede decir que sí, el Sol está evaporándose, es decir, se encuentra perdiendo masa constantemente a causa del viento solar.

No obstante, la corona y el viento solar son poco densos. A pesar de que este viento puede llevar consigo cien mil millones de toneladas de materia cada día, el Sol ha perdido tan solo alrededor de un 0,1 % de su masa total por este proceso desde que se formó hace unos 4 600 millones de años. De esta forma, se puede dar una idea de la escala y magnitud del Sol.

Por su parte los científicos se han encargado de seguir revisando mediante telescopios especiales cómo poco a poco se va evaporando el Sol con el paso de los años.

Con la noticia de que el Sol podría morir, los científicos estudian con mayor énfasis a este astro y han descubierto que algo sucede con el sol y tiene que ver con el viento solar, haciendo que su vida se vea afectada.

Primero debes saber que en el Sol hay una alta radiación electromagnética y partículas cargadas, por lo que son emitidas a grandes energías para llenar todo el espacio interplanetario. Estas partículas no viajan tan rápido como la luz, pero sí alcanzan velocidades de unos 500 kilómetros por segundo, llegando a nuestro planeta en pocos días.

Por lo tanto el viento solar se trata de un flujo continuo de partículas cargadas, emitidas por el Sol, y liberadas en todas direcciones desde la atmósfera superior del Sol.

El Sol siempre está arrojando estas partículas al espacio. El gas y las partículas provienen de la atmósfera exterior caliente del Sol, conocida como la corona solar. Entonces, el viento solar podría considerarse como la parte más exterior de la corona, que es expulsada violentamente hacia el espacio interplanetario debido a los procesos energéticos que se dan en las regiones inferiores del Sol.

El viento solar está compuesto de átomos de Hidrógeno (95%), Helio (4%), Carbono, Nitrógeno, Oxígeno, Neón, Magnesio, Silicio y Hierro (~1%). Las partículas se encuentran completamente ionizadas, formando un plasma muy poco denso.

El plasma es el cuarto estado de la materia, además de los tres más familiares sólido, líquido y gas. Es un estado parecido al gas, pero compuesto por átomos ionizados, donde los electrones circulan libremente. Si un gas se calienta suficientemente, los electrones se separan de los átomos y se mueven libremente, la materia ya no se comporta como un gas y se le da el nombre de plasma.

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