Acapulco, la crisis sobre la crisis
Pasan los días, pero la situación se mantiene. Los daños por Otis no se han cuantificado. Guerrero sigue en pie de lucha pero su gente no encuentra el camino.
”...no hay agua, no hay nada, necesitamos que nos apoyen, que nos ayuden por favor...” , comenta María del Rosario González, afectada por el paso del huracán.
La fuerza de la naturaleza destruyó en instantes el patrimonio de años construido. Las imágenes del antes y el después del huracán Otis vía satélite muestran el dramático cambio de Acapulco. Hoteles, puertos, estadios, todo cambio.
Pero lo que no ha cambiado es la necesidad de los guerrerenses de tener a sus gobernantes trabajando para ellos.
Como siempre no hay consecuencias, la gente está harta del abuso. Esa necesidad se agudiza, en Acapulco no existe el estado.
¿Dónde está el Gobierno? Acapulco en crisis
Más allá de la nula estrategia previo al huracán, el problema está en la nula respuesta de un gobierno que ha brillado por su ausencia.
“Dónde está tu apoyo cabrón, ahora sí te lo grito, no una chingada”, comentó un afectado.
No hay ley y no hay quien la haga cumplir. Abuso e impunidad y los robos no tienen fin. El robo de mercancías, saqueo de tiendas departamentales y de autoservicio impiden que la ayuda llegue.
Los mexicanos estamos listos para sumar con nuestros hermanos guerrerenses , ¡la autoridad no!
”...tenemos casa aquí, pero quedó realmente con daños y no sabemos cuanto nos duelen los víveres, no tenemos en que movernos...” , comenzaba Esther Molina, se van de Acapulco.
”.me quede sin nada, por favor ayúdennos, no tenemos agua, ni comida”, agregó María Chávez, damnificada.
Siguen esperando el apoyo
El apoyo no llega a las manos que lo necesitan, desaparece en los caminos a manos de delincuentes hambrientos o delincuentes con uniforme. Antes de pensar reconstruir Acapulco se requiere que se restablezca el estado de derecho.
