En Azteca Quintana Roo te contamos acerca de un pequeño que, al ver a su abuela con su primita, reacciona con celos y un rugido de dinosaurio para reclamar atención.

El video, compartido en TikTok, captura el momento en la casa de la abuela. Ella duerme plácidamente en el sillón con la bebé recostada en su pecho. El niño, de unos 3 años, entra y su rostro pasa de ilusión a desilusión. Comienza a gruñir, aprieta los brazos como un dinosaurio bebé, levanta puñitos, frunce el ceño y suelta rugidos hacia el techo. Sopla aire como lanzando fuego y gira en círculos, todo para impresionar y distraer. La abuela despierta riendo, sorprendida por el drama tierno.

Con edición de Hanna Andrade