Durante su visita a Hvar, Croacia, la protagonista disfrutaba de una comida cuando notó un desgarro en su vestido.
El atento mesero, sin dudarlo, extrajo una aguja e hilo de su bolsillo y procedió a coserlo con maestría directamente en la mesa, ante la sorpresa y gratitud de todos.
Emocionada, compartió el video en redes sociales con el mensaje: “Nunca bajé mis estándares después de que nuestro camarero en Croacia notó que mi vestido estaba roto y sacó una aguja e hilo para coserlo a mano en la mesa”.
Edición de Video: Hanna Andrade