Crisis de Medicamentos en Yucatán reflejo del difícil panorama de salud
En Yucatán y en todo el país, la salud pública está en “terapia intensiva”, y los afectados claman por una solución urgente para abastecer medicamentos.
En el Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán, la desesperación se siente en el aire. A pesar de su estructura imponente, la falta de recursos es evidente. Don Mateo, esperando noticias sobre la cirugía de corazón de su esposa, cuenta su experiencia: “Compré solo tres inyecciones, y dos no recuerdo qué es, me costaron 962 pesos”.
La Mega Farmacia, que se esperaba fuera la solución al desabasto de medicinas, no ha servido de nada. Las palabras de Mateo reflejan la realidad de muchos: “El dinero no alcanza y menos hoy, porque hay que pagar medicamentos que el hospital debería tener”.
Mateo Cruz, familiar de paciente, explica: “Nos hacen falta dos y tres cosas, entonces yo le dije, si por eso se va a detener mi paciente, yo lo compro, no lo tenemos, pero lo compramos, para que mi paciente se atienda y nos dijeron, pues sí, nosotros debimos haberlo tenido, pero no lo tenemos”.
La crisis se extiende más allá de Yucatán. Pedro Leal, Secretario General de la Sección 100 del SNTSA, comenta: “En medicamento y material de curación, hay una escasez. Solicitamos también medicamentos y material de curación en tiempo y forma, pero hemos tenido bastantes retrasos y ha habido algunas afectaciones”.
La situación es tan grave que el personal trabaja “bajo protesta”. Mantas similares a las colocadas en Yucatán se han visto en otros seis hospitales regionales de alta especialidad en el país. Las carencias afectan cada vez a más pacientes, como relata Loida Mateo, familiar de paciente: “No hay medicamentos, así es. Tuvieron que juntar y sacar de su bolsa para comprarlos”.
Incluso tareas básicas, como la limpieza, están en riesgo. Pedro Leal explica: “Tuvimos un momento muy álgido hace como un mes, mes y medio, donde el contrato del prestador de servicio de limpieza del hospital no había concretado esa parte legal que es el contrato, y ya estaba a punto de salir con todo y sus empleados”.
Los más necesitados son los más afectados. En Yucatán y en todo el país, la salud pública está en “terapia intensiva”, y las voces de los afectados directos claman por una solución urgente.
