Su nombre era Mario, un hombre de 43 años de edad, quienes estaba inmovilizado dese hace 11 años, y hoy martes 23 de noviembre, se conviritió en el primer suicidio asistido en Italia.
A pesar de que aún no hay ninguna legislación en el país europeo que permita regular el suicidio asistido, si se aprobó el primer caso, por lo que es muy probable que se puede con condiciones muy específicas, legislar este derecho.
Por medio de un fallo, Mario logró obtener su muerte. En el 2019, Italia señaló que el suicidio asistido debian darse ciertas condiciones como “un paciente mantenido vivo mediante tratamientos de soporte vital y que sufra de una patología irreversible, fuente de sufrimiento físico y psicológico que considere intolerable, pero que sea totalmente capaz de tomar decisiones libres y conscientes”.
Esta autorización implica un punto de inflexión histórico en Italia, pue sha sido una batalla contra el Vaticano y el gobierno de Silvio Berlusconi, quienes iban en contra del suicidio.
Mario, el nombre ficticio que se le dio para proteger su privacidad, fue largo, ya que tuvo que acudir con la ‘Asociación Luca Coscioni’ para luchar por este derecho.
“El comité de ética [del servicio sanitario público] constató que el hombre se encuentra dentro de las condiciones establecidas por el consejo para acceder al suicidio asistido, por primera vez en Italia”, anunció dicha asociación.
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Italia avanza en el derecho al suicidio asistido
En los últimos años hubo diversos casos dramáticos de personas que viajaban hasta Suiza para ser desconectadas de maquinarias que los mantenían con vida, pues en su país no se podía.
Así fue el caso que asentó jurisprudencia, fue el de Fabiano Antoniani, quien viajó a Suiza con la ayuda de Marco Cappato, para acceder al suicidio asistido .
Cappato pudo haber ido a la cárcel por este hecho, ya que la corte italiana buscaba imputar por 12 años ante la ayuda de suicidio, sin embargo, el hombre fue absulto.
Este martes, puede ser que en términos legales nada ha cambiado y el Vaticano sigue yendo en contra del suicidio. Pero, si pudo marcar el inicio de algo diferente, después de que Mario finalmente accedió a su derecho, por el que luchó por más de un año.
“Me siento más ligero, me he liberado de toda la tensión acumulada en los últimos años”, señaló el hombre al conocer la decisión.
