Este 8 de marzo se celebra el día Internacional de la Mujer, en el que alrededor del mundo mujeres salen a la calle para seguir exigiendo en su día sobre sus derechos, la lucha de la igualdad.
Durante estas movilizaciones pacíficas es posible que veas el color morado con uno de los principales, pero ¿por qué? Hay hechos históricos que hacen referencia a este color, verde y blanco, y se trata de cuando las mujeres inglesas en 1908, lo utilizaban para sufragar.
Asimismo, se habla del incendio de la fábrica Triangle Shirtwaist de Nueva York en 1911, donde testigos indicaron que las llamas salían de color morado.
Significado del color morado en las marchas feministas
El color morado proviene de la mezcla rosa y azul, ambos asociados con el género masculino y femenino. De acuerdo con la psicología del color, este transmite sensibilidad, elegancia y espiritualidad.
Ahora bien, de acuerdo a la activista Emmeline Pethick, el color morado o violeta, como también se le conoce, “simboliza la sangre real que corre por las venas de cada luchadora por el derecho al voto, conciencia de la libertad y la dignidad”.
De acuerdo, con la escritora Gemma Lineas, este color es importante y señala que este color, es con el que las personas, en general, deben mirar al mundo.
Desde el 2017 y 2018 cuando comenzó más fuerte el movimiento feminista con el #MeToo y #Time’sUp , en que se hablaba de acoso y agresión sexual en el mundo del cine, comenzando con el productor Harvey Weinstein, y culminando en cientos de empresarios.
¿Por qué se celebra el día de la mujer?
En 1975 se celebró por primera vez el Día Internacional de la Mujer, esto después de que la Asamblea General de las Naciones Unidas, hiciera formal la celebración de esta fecha.
Sin embargo, esta celebración se remonta al 28 de febrero de 1909, cuando el Partido Socialista de América designó el día en recuerdo de la huelga de trabajadoras del sector textil el año anterior en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos; esto de acuerdo con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos
Por su parte, también se refiere a la exigencia de las mujeres a principios del siglo XX el derecho al voto, así como mejores condiciones en los trabajos, formación profesional y no a la discriminación laboral.
