Sol, arena, mar, fiesta y comida deliciosa. Quizá es lo que se te venga a la mente cuando escuchas el nombre de Quintana Roo, pero este estado alberga una de las canchas más importantes del país; nos referimos al Estadio Olímpico Andrés Quintana Roo.
Ubicado en el corazón de Cancún, y con casi 40 años de historia, el recinto ha sido sede de al menos cinco finales del fútbol profesional y la visita de una de las figuras más grandes de la historia del balompié: Lionel Messi.
Futbolista con cáncer sueña con jugar como profesional
El 9 de diciembre de 2007, la gente de Quintana Roo disfrutó de la vuelta de la final entre Atlante y Pumas de la UNAM, donde el equipo de casa se coronó, gracias a Giancarlo Maldonado y Clemente Ovalle.
Tan solo dos años después, los potros se vieron las caras con Cruz Azul en la final de la Liga de Campeones de la Concacaf, en un reñido empate que le dio a los atlantistas la coronación por llevar ventaja en la ida.
En 2013, pudimos ser testigos de la revancha de este encuentro en la final de la Copa MX, donde los cementeros se impusieron en penales.
Ya para 2015, el Atlante, se jugó el ascenso contra el FC Juárez, en la ida de la final del apertura MX, donde lograron marcar el gol y llevarse los tres puntos.
Y cómo olvidar el encuentro que Lio Messi disputó contra las estrellas de México para ayudar a causas benéficas en el 2012.
Hasta ahora, el Estadio Olímpico ha sido casa de equipos como el Atlante, Los Pioneros de Cancún y el Cancún FC de la Liga de Expansión.
